Texto redactado el 19 de noviembre.
TODA LA ROPA SE HA MOJADO y el Pop Radikal Vasco se ha acabado.
Empieza a las nueve, pero no. Empieza a las diez menos cuarto, de aperitivo una historia de una mujer fascinante. Está claro que no se puede ser tan guapa.
Me presenté a Miss Madrid, pero no me cogieron porque era rubia y de ojos azules y soy madrileña de pura cepa…/… Quería tener hijos, pero el hombre al que amaba no me quería y así me lo hizo saber: ¡_______ ,vete. Yo no te quiero!- Días después me confeso que me imaginaba con un hombre moreno y yo buscaba y buscaba hasta que encontré al padre de mi hija, que no tiene mis ojos tiene los ojos de su padre. Ella es como salvaje, como una indígena que tiene instintos primarios en sus movimientos y en cómo se relaciona con el espacio. El pequeño no es del mismo padre y ninguno de ellos está conmigo por eso los niños se llevan bien entre ellos. Sigo enrollándome con el hombre al que amé y que no me quiso, pero es una relación basada en el sexo y sexo se puede tener con cualquiera. El otro día con el vecino, que tiene 25 años. Si, iba a quedar con Él, pero no quiso porque tenía la regla, pero mi ligue me comió el coño. Jajjjajajajajjjjajajjajjajjajajajjajaajjajajajja. Mira al camarero y se pinta los labios, después me dice que eso que dicen de que las rubias que no se enteran de nada, que en su caso es cierto.Nada de lo que ha dicho me creo. Comienza el concierto, en la entrada dos señoritas me piden 6€, el valor de este cartel. Me parece mucho para mi bolsillo, poco para lo que se avecina.
Empezamos. Miguel A. García está vestido como habitualmente pero no se quita la chaqueta creo que porque ha estado resfriado, en una mesa sin silla, con un foco de luz blanca hacía su redonda cabeza que no levanta en todo el concierto.
Mikel nos deleita con un concierto que si bien para mi es completamente nuevo y me creo que lo ha compuesto para esta ocasión, en realidad ya lo había hecho para una sesión en el Ertz y esto me decepciona, ciertas connotaciones melancólicas ya no eran un reflejo de su estado de ánimo, Mikel había estado enfermo y no había salido de casa en una semana devorando capítulos de Mad Men, las cuatro temporadas para ser exactos.
No señora. Esto es así, primero empieza con una serie de sonidos difíciles de identificar, pero que parecen capturados de algún sitio y después modificados, con todos sus mátices y sus diferencias que todos tratamos de desenmascarar. Estos conciertos me cuestan un esfuerzo. Aquí estamos con Mikel dejándonos llevar y cuando eso sucede y pierdes la noción del tiempo llega el final, es como una traca final, lo mejor o lo más intenso. Aquí tenéis cabrones. Y después de fruncir el ceño de mil maneras con cada sónido nuevo, levanta la cabeza cabeza y sonrie. Ya está. Y el público aplaude. Mikel sale de escena y Elena que está en el otro lado se le acerca y le abarca con todo su cuerpo, le besa y algo le dice que no sabemos.
Elena Aiztkoa es su nombre. Haga lo que haga es una diamante en bruto, ella es escultura, ella es pintura, ella es poesía.
Curiosidad. Qué hará. Pues ser ella explorando su voz en el escenario. Elena tararea con lara y con lere. Luz para todos, ella nos quiere ver mientras nosotros le miramos. Elena es alta y de cabeza erguida, no titubea, es decidida, ella se expone ante nosotros con su canto en bruto, esto es lo que hay, lara y lere y así hasta el final que dura lo justo. Su lengua baila en su boca la misma coreografía todo el rato y no creo que todavía no ha cerrado la boca. Hostias, tanto lara y tanto lere, no lo aguanto y sin embargo me parece tierno y maternal y súper bien como todo lo que hace Elena, que también cocina bien.
Después seguimos con Grumos Lalai. Este nombre horrible para un grupo, pero bueno. Otra luz en el escenario, roja y parpadea.
Estoy nerviosa y ansiosa de verlos, me encantaron la otra vez. Sonido de acoples salen, hoy vamos de sutileza en sutileza, todo suave, Grumos me embelesa con su torpeza. Hoy no están sincronizados, hoy están cada uno en un planeta. Como son estos machos. Ellos tan sensibles y delicados, ahora pueden ser todo lo hombres que quieren pero con humor. Esto me disgusta, pero es indispensable, es necesario, descargamos carcajadas contenidas. Silencios muy largos y duros esperando el momento para el grito de protesta. Una mascara con trenza, una camisa de leñador, unos puños cerrados y una postura en tensión como de preparados listos ya. Para los que no lo han visto antes, lo han descubierto, para los que ya lo habíamos visto, no se podía superar.
Un señor entra y grita, esto es Pop Radikal Vasco, tensión. Héctor levanta la cabeza y Grumito le responde, otra vez la risa y eso ha sido casi todo. Un éxito total.
Me quedo una, la nota discordante. Siempre es lo mismo y siempre es diferente. Las Elbis Rever se salen en reinventarse, está vez coge la batuta Natalia. Ella es la rubia de las Elbis, cuidado Nata no te pases, que esa rubia está muy bien. Respétala, es la rubia que se entera de todo, es la rubia que todo lo sabe, es la rubia que no se corta, que no tiene pelos en la lengua. ¡Qué gusto! Así se acaba la canción, una que habla de hacerlo en un coche. ¡Ven, ven acaríciame, venga, venga, tengamos hijos!…/…¡Kepin Kepan! ¡Kepin kepan! Aforo completo de repente.
La misteriosa Alba Burgos, pinta por el día y por la noche es Gogó. Inteligente no, lo siguiente. Es que no lo quieras saber todo de Alba, solo que hace lo que quiere aunque tenga que trabajar en el aeropuerto. Eso se ha acabado. Cuadros de olas y muchos colores, plotter en lonas gigantes y esto es un no parar. En el escenario para empezar se da la vuelta y antes de mirar al escenario le mira a Natalia y ellas saben que esto va a empezar, que lo bueno ha llegado. La diversión está asegurada. ¡Me encantan!